Sonrisas con dopamina...

 

Uff qué calor

Uff qué falta de ganas de todo

Uff qué factura de la luz voy a recibir con tanto aire acondicionado

Uff todo el mundo de vacaciones y yo aquí, en el mismo sitio

Uff..., uff... y más uff al infinito.

 Venga, ya está. Desahogo, agua fresca en la cara y como mal de muchos consuelo de tontos... todos a una: ¡¡Yo no soy tonto!! Así que nos ponemos en pie (física o anímicamente) y a por ul nuevo día. Nosotros podemos generar dopamina sin medicación, sin casi efectos secundarios (porque una lagrimita perdida, aquí o allí, una o las que hagan falta) son permitidas. No llueve, pero también podemos bailar bajo el sol, no solo bajo la lluvia. sino bajo todas las condiciones climáticas. ¿Os apuntáis?

Mejor sonreír que llorar.

Mejor moverse cada uno como pueda que quedarse quieto, porque si el movimiento se demuestra andando, el nuestro lo demuestran nuestras neuronas sanas. Que haberlas, haylas (traducción: haberlas las hay).

¿Y si tal y como organizamos nuestras emactividades, organizamos nuestras sonrisas? Al principio se organizan,  pero como no dejamos de ser animales de costumbres, a base de repetir el automatismo aparece solo. Todo es probar; todo es intentarlo; todo es dar el primer paso en forma de sonrisa; todo es ponerse en marcha. No importan los gustos, no importan las circunstancias. Aquí y en nuestra situación (por no decir en todas), si se quiere se puede y... ¿por qué no intentarlo al menos? Puede costar, pero el beneficio es tan gratificante y económico... 

Al lío con ganas, y si no se tienen, ¡se hacen!, como decía mi madre. Leer ayuda, ver películas interesantes también, hablar con gente con la que se tenga afinidad más de lo mismo y... dar portazos a lo que no, más de lo mismo. A quien no sume, a quien sus demostraciones no sean las que buscamos porque, ¿no podemos decidir a quién queremos a nuestro lado?, pues aire. Que ahora incluso viene bien. Excepto, relaciones platónicas que pueden estar permitidas si ayudan y hasta que dejen de hacerlo, en nuestra mano está poder elegir lo que sintamos como apoyo y el resto... quizá será en otra vida, porque recordad que #TalVezUnQuizáBaste .

La dirección de nuestro camino solo la programamos nosotros en nuestro gps... y ¡prohibiciones fuera! Nosotros decidimos...