Explota explota, me explo...


¿Había utilizado ya esta foto? No lo sé, tampoco es que importe mucho porque, como decía Willian Wallace, no nos quitarán....  ¡la libertad!
¿Que hay que poner los puntos sobre las íes? Pues se ponen.
¿Que hay que desconectar el teléfono fijo? Pues se desconecta.
¿Que hay que ser independientes de verdad? Pues se es. Mira mi amigo Omar, con su scooter frente a las adversidades del asfalto.
¿Que hay que decir a todos (incluido a uno mismo) pelillos a la mar? Pues a todo hay que aprender.

¿Será por aprender?......................... (Pausa para pensar)

Soy la primera que tuve que "enseñar" a mi familia estilos de vida, según iba aprendiendo en la universidad a algo más que dar masajes. Tuve que enseñar también que la diferencia entre diplomado o licenciado, no era de mi época, o más bien de mi parecer cuando hablaba con personas que lejos de ser eso, personas, compartían material genético conmigo porque ¿a mí que más me daba si hablaba con un título u otro? Aún ahora, muchos años después no lo entienden.Así que la #em también me ha dado la capacidad de aprender a guardar la paciencia en un tarrito invisible (muy mono, eso sí). Uno que solo veo yo. Al que nadie más puede acceder. Y cuando se abre.... ¡Ay, cuando se abre! Ríase la Caja de Pandora. Así que, si tengo claro lo que soy mucho más que las titulitis, ¿por qué me debería importar la consanguinidad? ¡Pues, pelillos a la mar! (Aunque para las trasfusiones pueda ser importante, espero no tener que saberlo nunca). (Otra pausa para pensar).


Soy más que un título. Soy más que una enfermedad. Más que una incapacitada y discapacitada (aunque mis consanguíneos licenciados o no) no sepan la diferencia y tampoco presten atención al explicárselo. ¿Que soy un zasca andante? No diré que no, pero estos me van quitando kilos según se ven fuera de mi cuerpo y es más fácil que hacer dieta.  ¿Que el peso que me ha quitado la esclerosis no se puede contabilizar ni en kilos ni en nada conocido? Pues al pie de guerra con la #neuroatipicidad. Esta también es una cualidad. 
Ufff, que bien me encuentro cuando escupo todo lo que tantos años llevaba dentro y no podía decir en el alto, bien porque las miradas que se fijaban en mí eran tan afiladas como los comentarios que llevaban de la mano, o bien porque el desconocimiento de mí misma y mi enfermedad me conducían por el camino estipulado por otros (muchos en mi caso).

¿Estoy echando demasiado rollo para decir lo que quiero? Pues por si la respuesta es afirmativa, lo resumo :

                            QUE NADA NI NADIE OS PRIVE DE SER LO QUE QUERÁIS.

Si la enfermedad no nos deja por fuera, por dentro podemos cambiarlo.
Si la enfermedad nos mata neuronas sin pena punible por la Ley, pues ya nos convertimos nosotros en nuestra propia Ley. 
Antes de llegar al explota explota, me explo... Intentadlo al menos, que la meta es más que gratificante. Es pura ciencia ficción real. Muy real. 
                           



2 comentarios:

  1. Angie me encanta leer tus post, sigue escupiendo por la boca tus sentimientos, que algunos si se quedan dentro no hacen ningún bien, y si lo sacas si Ana bien a mucha gente (como a mí) y a los que no les guste pues... Eso ya están diciendo mucho de cómo son, y que les interesa en esta vida

    ResponderEliminar
  2. Me suele hacer gracia eso que dicen algunos de que "uno elige su familia". Creo que el espermatozoide que te engendra no tiene muchas posibilidades de elección y lo que en realidad te toca es tener que aguantar las chorradas que te quieren endosar. El amor y el respeto no incluyen la exigencia de tener que asumir las reglas de quien los profesa.

    ResponderEliminar